Sebastián Cobelli charló con Intercele luego de haber realizado su primera práctica con sus nuevos compañeros del Gasolero.
- ¿Cómo se dio tu arribo al celeste?
- Arreglé todo rápido, mañana estaré firmando el contrato. Estoy muy contento.
- Imagino que es una vuelta al fútbol especial para vos después de estar seis meses parado...
- Sí, obvio. Tenía posibilidades de volver a Perú, de jugar en Chile pero quería hacerlo en mi país y si era en Buenos Aires muchísimo mejor. Estoy preparado para el desafío que se me presenta, quiero ponerme diez puntos físicamente para cuando empiece el torneo arrancarlo de la mejor manera.
- Estabas jugando para el CEFAR e hiciste un par de goles en uno de los amistosos ante Temperley. ¿Eso fue clave para que se fijaran en vos?
- Puede ser, aunque Ricardo (Dabrowski) ya me conoce porque me tuvo en Newell's -era ayudante de campo de Mirko Jozic- cuando recién arrancaba. Me vio bien, me preguntó si me interesaba y luego me reuní con los dirigentes. Nos pusimos rápido de acuerdo.
- ¿Y porqué Temperley antes que otra posibilidad?
- Porque veo que tienen un club que por historia, tiene que estar más arriba. Los dirigentes me contaron que asumieron con una herencia difícil de la gestión anterior pero igual yo me ilusiono con ascender. Me contaron que hay buenos jugadores, los estoy conociendo y veo que hay un grupo joven y humilde, con mucha hambre.
- ¿Tu reciente casamiento con Fernanda Vives -que trabaja en el Teatro- tiene que ver con que quieras jugar en Capital o Gran Buenos Aires rechazando ofertas de afuera?
- Seguro. Tuve chances de ir a la tercera de Italia por más dinero o a Chile, pero obvio que influye el tema familiar. Mi señora tiene trabajo acá y no puedo ser egoista, la idea es que los dos estemos a gusto haciendo lo que más queremos.
- ¿Tu juego fue variando por tu físico: digo, de un Cobelli que iba más por afuera al Tanque de área que terminó jugando en Talleres?
- Es que cuando arranqué hacía eso porque iba de punta con Real, que tenía menos movilidad que yo a los 22 años. Ahora tengo 32, lógico que el físico no es el mismo, pero aún así me las rebusqué para hacer una buena dupla con Salmerón en Talleres donde hicimos 20 goles. Me gusta más estar en el área, pero no tengo problemas en ir un poco por afuera si tengo que hacerlo en alguna jugada.
- ¿Cómo estás en lo físico? ¿Hace cuánto estás sin actividad?
- Normal, me falta ritmo de juego que es lógico porque mi último partido en Perú fue en diciembre del año pasado pero después estuve entrenando con el CEFAR. Tengo que aprovechar la pretemporada de la mejor manera: hablé con el "profe" para hacer varios dobles turno aprovechando a full el gimnasio que tiene el club.
- ¿Creés que vas a estar para el debut o recién estarías para una tercera o cuarta fecha?
- No, creo que voy a comenzar jugando siempre y cuando así lo disponga el cuerpo técnico. Voy a aprovechar estos días para conocer a mis compañeros, hablar mucho con ellos y espero rendirle al club por las expectativas que deposita en mi al traerme.
- ¿Te ponés una meta en cuanto a goles?
- Dije que me gustaría hacer 20, pero no me gusta ser egoista. No sirve hacer 20 si el equipo no funciona, mejor hacer 35 entre los hombres de ataque y que estemos en la lucha. Tenemos que sacar a este club adelante, con lo que tenemos y poniendo lo máximo de nosotros para ser protagonistas.
- La última. El hincha del Cele ha recibido con cierto escepticismo tu contratación porque el último delantero de renombre que llegó al club -Bustos Montoya- venía con una situación similar a la tuya, de seis meses sin jugar. ¿Qué podés decirles?
- No me gusta hablar de los colegas, pero todos los futbolistas tenemos clubes donde la rompemos y otros donde no nos va bien. Los que llegamos con cierto nombre a un club siempre vamos a ser el chivo expiatorio si las cosas no salen, pero me siento con muchas ganas de jugar y de demostrar que todavía puedo seguir dándole cosas al fútbol argentino. He recibido puteadas de todos los colores, estoy acostumbrado a la presión y espero responder en un club importante como Temperley.
- Arreglé todo rápido, mañana estaré firmando el contrato. Estoy muy contento.
- Imagino que es una vuelta al fútbol especial para vos después de estar seis meses parado...
- Sí, obvio. Tenía posibilidades de volver a Perú, de jugar en Chile pero quería hacerlo en mi país y si era en Buenos Aires muchísimo mejor. Estoy preparado para el desafío que se me presenta, quiero ponerme diez puntos físicamente para cuando empiece el torneo arrancarlo de la mejor manera.
- Estabas jugando para el CEFAR e hiciste un par de goles en uno de los amistosos ante Temperley. ¿Eso fue clave para que se fijaran en vos?
- Puede ser, aunque Ricardo (Dabrowski) ya me conoce porque me tuvo en Newell's -era ayudante de campo de Mirko Jozic- cuando recién arrancaba. Me vio bien, me preguntó si me interesaba y luego me reuní con los dirigentes. Nos pusimos rápido de acuerdo.
- ¿Y porqué Temperley antes que otra posibilidad?
- Porque veo que tienen un club que por historia, tiene que estar más arriba. Los dirigentes me contaron que asumieron con una herencia difícil de la gestión anterior pero igual yo me ilusiono con ascender. Me contaron que hay buenos jugadores, los estoy conociendo y veo que hay un grupo joven y humilde, con mucha hambre.
- ¿Tu reciente casamiento con Fernanda Vives -que trabaja en el Teatro- tiene que ver con que quieras jugar en Capital o Gran Buenos Aires rechazando ofertas de afuera?
- Seguro. Tuve chances de ir a la tercera de Italia por más dinero o a Chile, pero obvio que influye el tema familiar. Mi señora tiene trabajo acá y no puedo ser egoista, la idea es que los dos estemos a gusto haciendo lo que más queremos.
- ¿Tu juego fue variando por tu físico: digo, de un Cobelli que iba más por afuera al Tanque de área que terminó jugando en Talleres?
- Es que cuando arranqué hacía eso porque iba de punta con Real, que tenía menos movilidad que yo a los 22 años. Ahora tengo 32, lógico que el físico no es el mismo, pero aún así me las rebusqué para hacer una buena dupla con Salmerón en Talleres donde hicimos 20 goles. Me gusta más estar en el área, pero no tengo problemas en ir un poco por afuera si tengo que hacerlo en alguna jugada.
- ¿Cómo estás en lo físico? ¿Hace cuánto estás sin actividad?
- Normal, me falta ritmo de juego que es lógico porque mi último partido en Perú fue en diciembre del año pasado pero después estuve entrenando con el CEFAR. Tengo que aprovechar la pretemporada de la mejor manera: hablé con el "profe" para hacer varios dobles turno aprovechando a full el gimnasio que tiene el club.
- ¿Creés que vas a estar para el debut o recién estarías para una tercera o cuarta fecha?
- No, creo que voy a comenzar jugando siempre y cuando así lo disponga el cuerpo técnico. Voy a aprovechar estos días para conocer a mis compañeros, hablar mucho con ellos y espero rendirle al club por las expectativas que deposita en mi al traerme.
- ¿Te ponés una meta en cuanto a goles?
- Dije que me gustaría hacer 20, pero no me gusta ser egoista. No sirve hacer 20 si el equipo no funciona, mejor hacer 35 entre los hombres de ataque y que estemos en la lucha. Tenemos que sacar a este club adelante, con lo que tenemos y poniendo lo máximo de nosotros para ser protagonistas.
- La última. El hincha del Cele ha recibido con cierto escepticismo tu contratación porque el último delantero de renombre que llegó al club -Bustos Montoya- venía con una situación similar a la tuya, de seis meses sin jugar. ¿Qué podés decirles?
- No me gusta hablar de los colegas, pero todos los futbolistas tenemos clubes donde la rompemos y otros donde no nos va bien. Los que llegamos con cierto nombre a un club siempre vamos a ser el chivo expiatorio si las cosas no salen, pero me siento con muchas ganas de jugar y de demostrar que todavía puedo seguir dándole cosas al fútbol argentino. He recibido puteadas de todos los colores, estoy acostumbrado a la presión y espero responder en un club importante como Temperley.
* Foto: Gentileza Diario Info Región
No hay comentarios:
Publicar un comentario