domingo, 2 de mayo de 1999

Pedido de informes de los abogados de Agremiados

Donde si hubo novedades fue de parte de los Abogados de Futbolistas Argentinos Agremiados los cuales hicieron un pedido de informes a la nueva Sindicatura cuestionando su informe del mes de Diciembre donde señalaban que el año 1998 había finalizado en equilibrio financiero.

En una detallada presentación demuelen el argumento de equilibrio económico que siempre sostienen, tanto los abogados de Temperley como los actuales miembros de la Sindicatura y sostienen que la continuidad del fútbol perjudica con su déficit a los intereses de los acreedores.

En nuestro próximo número nos explayaremos con mas detalle sobre esta presentación y sus eventuales consecuencia.

Nuevas precisiones sobre el tema de la Quiebra

Cada vez que tomamos contacto con algún miembro de la Sindicatura y comenzamos a preguntar sobre las novedades del tema de la Quiebra del Club Atlético Temperley se nos produce una gran incertidumbre respecto a lo que pueden ser las respuestas a nuestras preguntas.

En este sentido, en nuestra opinión no responsabilizamos a los Síndicos del hecho que los socios del Club Atlético Temperley se estén enterando de los detalles del real estado de situación en cuentagotas. Como ya hemos repetido (hasta el cansancio) no es función de la Sindicatura informar al Socio del Club Atlético Temperley sobre la marcha económico financiera de la Institución, mucho menos es su función informarnos sobre el tema de la Quiebra.

Quienes debieran hacerlo son, en el primer caso la Comisión Directiva y en el segundo los abogados de la Institución. Lamentablemente, el socio celeste en ninguno de los dos casos obtiene respuestas satisfactorias. Los dirigentes, cada vez que se les pregunta sobre la situación económico - financiera de la institución describen un panorama que uno supone que se están refiriendo al Barcelona de España o a la Ajax de Holanda. Por su parte cuando se les pregunta a los abogados respecto a la marcha judicial del tema de la Quiebra, la respuesta desde hace mas de tres años, es la misma: el levantamiento es inminente y por mucho menos dinero que el que se pensaba.

Ya nos hemos referido en el número anterior a las mentiras y al efecto nocivo de las mismas en la confianza y en el poder de movilización de la gente. Por tal motivo desde este medio intentamos, cada vez que obtenemos información fehaciente, volcarlo para difundir la verdadera situación de la Institución.

Respecto a la marcha de la tramitación Judicial del tema de la Quiebra, hemos visto el expediente la semana pasada en los Tribunales de Lomas de Zamora y luego de la presentación de levantamiento de la Quiebra realizado por los Dres. Zunini y Pecorelli no ha habido ninguna novedad en el mismo de parte del Juez o de los abogados de Temperley salvo por una autorización para ver el expediente a dos personas emitido por el Dr. Zunini. Recordemos que esta presentación cualquiera fuera su destino (aprobada o rechazada) puede ser apelada en segunda instancia (Cámara de Apelaciones), por tal motivo no es posible asegurar que el tema se resuelva en un plazo relativamente corto.

Por otra parte la Apelación de los Abogados de Agremiados realizada en febrero al incidente de la Ley 24.283, duerme el sueño de los justos en la Secretaría de la Suprema Corte Bonaerense, la cual todavía ni siquiera le ha dado ingreso por Mesa de Entradas y no se espera que este hecho suceda antes de la Feria Judicial de Julio. Salvo que alguien mueva algún hilo político. Esta salvedad es válida puesto que, en la Justicia Argentina, cuanto más alto se llega mas fuerte es la incidencia política en las decisiones.

Respecto al tema del dinero depositado obtuvimos algunas precisiones mayores por parte de los Síndicos. Antes que comenzaran las quitas, el dinero depositado en la cuenta "oficial" era de $ 528.000, el dinero que apareció "mágicamente" en otra cuenta era $ 69.000, totalizando una suma aproximada a los $ 600.000.

Obtuvimos alguna precisión mayor por parte de la Sindicatura respecto al dinero "aparecido". El mismo se habría originado en recaudaciones realizadas previas a la apertura del Club y la vuelta del Fútbol. Cuando a mediados de 1993 se transfirió la causa desde el Juzgado del Dr. Durañona al del Dr. Torija Zane, el primero habría omitido informar al segundo sobre esta cuenta separada. Por tal motivo esta "aparición" también fue una sorpresa desagradable para el actual juez de la causa quien en principio sospechó de Baldomero, pero luego de investigar comprobó que la desprolijidad era bastante anterior a su gestión.

Las quitas, hasta ahora fueron varias y, lamentablemente no se detendrán en el futuro. Las informadas por los Síndicos fueron los $ 91.000 por aportes y retenciones a la DGI, $ 5.000 por un juicio laboral. La semana anterior se debitaron $ 30.000 correspondientes a acuerdos con personal despedido y juicios. Esta semana la quita fue de $ 37.000 correspondiente a acuerdos laborales incumplidos con el cuerpo técnico integrado por Juan Carlos Merlo y el Profesor Garrandés. En este punto es preciso señalar que tanto Merlo como Garrandés resignaron en un acuerdo los intereses por mora desde la fecha de vencimiento de los documentos que poseían en su poder. Este importe totaliza $ 163.000

Otros conceptos que serán próximamente debitados serán los pagos omitidos por aportes a la Obra Social a la DGI importe cercano a los $ 25.000 y una deuda con el actual médico del plantel, el Dr. Pagano (al cual no se le paga desde Agosto de 1998) por una cifra cercana a los $ 8.000.

Como novedad desagradable, informaron los Síndicos que ingresó en la Quiebra de Temperley una demanda judicial por $ 61.000 del Profesor Lombardini (PF de Caruso Lombardi).

Por último le preguntamos a los Síndicos sobre la situación económico financiera de la marcha actual del Club, a este respecto informaron que el Club no está generando déficit operativo significativo, pero que se encuentran sumamente preocupados debido al reinicio del fútbol en la temporada 1999 / 2000. De hecho informaron que consideran que va a ser muy difícil presentar al Dr. Torija Zane un presupuesto para la próxima temporada, basado en hechos concretos que sea factible de cumplimentar.