Días de reuniones

Dirigentes, cuerpo técnico y jugadores. Las tres partes que, según dicen los libros del fútbol, deben estar unidas para llegar al éxito fueron partícipes ayer de una mañana llena de reuniones. Y cada una tuvo un común denominador: buscar la levantada de un Temperley que en las últimas fechas ha ido en franca caída.

En primer turno hubo una charla entre el entrenador José Barrella y sus dirigidos donde se habló mucho sobre la derrota ante Social Español, se trataron algunas cuestiones tácticas y también se apuntó a mejorar la actitud de cara al partido del viernes ante Acassuso. Ahí, el DT confirmó lo que se preveía: cambiará de sistema táctico y volverá a la línea de tres en el fondo con los ingresos de Lucio Micheli por Luis Rodríguez y de Arístides Pertot por Rubén Ratto para pasar a un 3-4-1-2 bien clarito dónde jugarán Rodrigo Salomón, Leandro Sosa y Diego Rodríguez en la defensa; Mauro Pajón, Emiliano Giannunzio, Micheli, Juan Manuel Quevedo; Pertot; Maximiliano Núñez y Emiliano Impallari. El arquero, obviamente, será Crivelli. (Mendoza, recuperado, iría al banco).

Rodríguez, que es un inamovible para Barrella, consideró que el equipo “debe salir adelante en las fechas que quedan porque sino la segunda rueda será muy complicada para todos”. Y, de paso, reconoció que “el grupo tuvo una charla bastante autocrítica en la que se buscó recobrar la actitud porque sabemos que ante Español el juego que se desplegó en la cancha no fue ni una sombra de lo que veníamos haciendo”. Y remarcó: “Es bueno sacar fuerzas entre todos, escuchar al compañero y corregir los errores en grupo”.

¿La tercera charla? Sí, fue la que encabezaron los dirigentes en el Beranger. El presidente Marcelo Mozo, el vice Gustavo Caccace y varios hombres más de la cúpula de la CD estuvieron dialogando con el plantel primero y con Barrella después. “La idea fue ir a transmitir un poco nuestro apoyo, a decirles que tienen nuestra confianza y a hablar con ellos para que salgan adelante porque sabemos que este momento es clave”, remarcó el mandamás del club.

Asimismo, Mozo recalcó que “el objetivo para la temporada es entrar al Reducido y sabemos que si bien no estamos en la mejor situación tampoco estamos tan lejos. Todavía la cosa es reversible, podemos estar un poco más arriba, pero hay que empezar ahora”.

Para Rodríguez, la clave pasará por “recobrar la actitud” porque “no se puede jugar con tanto desorden y tan poca entrega como la que tuvimos ante Español”. Y remarcó: “Nos llamó la atención a nosotros mismos ver lo mal que jugamos ese partido, que era uno de los que teníamos que ganar”.

El plantel entrenó ayer en el estadio y volverá a hacerlo hoy. Por la mañana los no citados para el duelo ante Acassuso (el viernes 20.30, arbitraje de Derevnín) harán un partido amistoso y los convocados entrenarán por la tarde en el estadio para practicar pelota parada y escuchar la charla táctica de Barrella.

PD: Ah, el martes ante Morón nos dirige Carlos Stoklas; el árbitro que hizo un papelón en Los Andes y All Boys el último domingo... Y seguimos con los árbitros prestigiosos...