Mas de lo mismo

TEMPERLEY 0 - DEPORTIVO MERLO 1

El Celeste sigue sin poder levantar cabeza en este Clausura y volvió a perder: esta vez fue 1-0 ante el Deportivo Merlo en el Oeste. Los horrendos fallos arbitrales pesan, y mucho; sin embargo, las carencias a la hora de enhebrar juego siguen en su preocupante marcha, dejando en segundo plano a los de negro. De esta manera, el Reducido se aleja y Temperley no despega. Así va a ser difícil…

Sincerémonos: mal que nos pese, Merlo es un rival de temer para este Temperley. Y mucho más, si el escenario es el Parque San Martín, donde el Depo se hace fuerte y no pierde desde hace más de 4 meses. El propio realismo también nos impone pensar que el Cele no mereció irse con las manos vacías del Oeste. Resumiendo la historia, fue otra injusta pero previsible derrota, con la que dejamos pasar una inmejorable chance de descontarle a los rivales directos por la lucha al Octogonal.

El partido fue cambiante en la dominación pero unánime en la desorganización colectiva de ambos conjuntos. El campo de juego (lo más parecido a un chiquero) no ayudaba y cada pelota dividida era un literal combate entre 4 jugadores –algunos con los nervios alterados- donde el pobre balón era lastimado con más rechazos que pases. Lo tuvo el local en los pies de Franco Romero, y enseguida contestó Pasquinelli. Quizás la ansiedad y los rebotes insólitos producto del barro, hacían que el trámite sea entretenido. ¿De fútbol? Poco y nada.

El complemento fue igual de mal jugado, sumado al cansancio de los protagonistas que, ya con barro en todo el cuerpo, aportaban para empobrecer la partida. Zielinsky mandó a Caballero para intentar pesar en el área, sentando en el banco al chico Figueras. Poco a poco el Cele conseguía quebrar el mediocampo local, pero siempre faltaba el último toque. Para colmo, cada contra de Merlo era medio gol: primero fue Romero y minutos más tarde Ávalos, quienes se turnaron para hacer vibrar el palo y el travesaño respectivamente. El partido iba tomando gusto y se armaba un ida y vuelta que no duró más que 5 minutos, en los que cualquier cosa pudo haber pasado.

Y justamente eso pasó. Es decir, CUALQUIER COSA. Rodrigo Salomón cuenta con infinitos dotes técnicos y físicos, los cuales para quien suscribe, lo convierte en uno de los mejores defensores de la categoría. Si algo se le reprocha a “Manzana”, es su falta de temple en momentos críticos. Pero para desorientar aún más a usted, amigo lector, le cuento que a falta de `8, Salomón se barrió en el área exquisitamente recuperando un balón estupendo, y cuando los aplausos de la parcialidad celeste comenzaban, el mandamás del juego, el Sr. Grone, pitó penal. Luis Avalo engañó a Crivelli, que eligió su palo izquierdo, y puso el 1 a 0 definitivo. Desde aquí, prefiero reservarme opiniones sobre el árbitro, ya que una persona de ese calibre no merece reflexión alguna.

Temperley no jugó bien ni mereció más que el empate, eso está claro. También parece inquebrantable el futuro oscuro de esta temporada, donde a pesar de tantas pálidas, no es imposible llegar al Reducido (estamos a 4 unidades). La pregunta es: ¿Qué va a inventar Ricardo Zielinsky para cambiar radicalmente este presente?

SINTESIS

MERLO 1: Negro Luqui; Vila, Anaut, Vendakis, Otermín; Damián Aiello, Leonel García, Biglia; Luis Avalo; Franco Romero y Meinecke. DT: Juan Carlos Kopriva.

TEMPERLEY 0: Federico Crivelli; Mauro Navas, Rodrigo Salomón, Héctor Virardi, Lucas Abraham; Cristian Figuera, Héctor Aguilar, Luis Rodríguez; Jorge Martínez Ramos; Rodrigo Stalteri y Fernando Pasquinelli. DT: Ricardo Zielinski.

Gol: ST 37m Avalo (M).

Cambios: 16-Pablo Caballero por Figuera (T), 15-Brian Nejamen por Meinecke (M), 14-Maximiliano Pogonza por Aiello (M), 13-Gabriel Ferro por Avalo (M) y 15-Cristian Saboredo por Navas (T), 14-Elio Yegros por Abraham (T).

Amonestados: Vendakis y García (M); Aguilar, Salomón y Abraham (T).

Expulsados: No hubo.

Arbitro: Javier Grone (Pésimo)

Cancha: Deportivo Merlo (Muy mala)