sábado, 26 de agosto de 2006

El Celeste acertó una vez

Comentario del partido Temperley 1 - Defensores de Belgrano 0 Jugado el 26-8-06 - Quinta Fecha del Apertura 2006/2007 - Fotos de Adolfo Lazzarini






















En realidad, el título de este comentario, para ser mas justo con lo sucedido esta tarde en el Beranger debió haber sido, "Temperley acertó en la única que tuvo" pues en un partido de tono menor, en el cual ambos equipos mostraron un muy pobre nivel desde lo ofensivo, y en el cual prácticamente no hubo situaciones de peligro, el Celeste convirtió en el final la que tuvo, y a otra cosa.
De cara a este partido, estaba claro que la idea de Walter Céspedes era la de darle a los jugadores con mas experiencia en el plantel la responsabilidad de asumir este momento complicado del equipo, en el cual no se lograban los resultados y, mucho menos, un rendimiento acorde con las expectativas de todos. Volvió Virardi a la zaga central, Giannunzio y el debutante Luis Rodríguez en la mitad de la cancha.
Apenas transcurridos unos pocos
minutos de partido quedaron claras dos situaciones, en primera medida el rival era, por lejos, el de peo
r nivel de todos los que el Celeste había enfrentado hasta el momento. El equipo del bajo, que al igual que el Gasolero fue uno de los protagonistas del torneo pasado, muy poco tiene que ver con lo mostrado anteriormente. Sin volumen de juego, con muchos desacoples defensivos y con dos delanteros metedores pero que los habilitaban mal y esporádicamente.
Por el lado de Temperley el panorama no era muy distinto Sin ánimo de ofender a nadie, el planteo
de Walter Céspedes nos hizo acordar mucho a los que en la temporada pasada nos tenía a
costumbrados Salvador Pasini. Temperley jugó con una línea de cuatro en la cual, los marcadores de punta prácticamente no se proyectaban al ataque, un cinco para tratar de correr a todos, dos
carrileros mas preocupados por la marca y la subida de los volantes rivales, pues Mendoza marcaba por donde fuera a Screpis y Luis Rodríguez hacía lo propio con Unyicio, un enganche que trataba de tomar el timón del partido pero que solo podía tomar contacto con el balón en forma muy esporádica y dos delanteros que fueron todo el partido habilitados con "ladrillazos" a dividir, que recibían de espaldas, y no lograban juntarse entre ellos.
Por lo comentado de ambos equipos,

el resultado, para el sufrido espectador fue catastrófico. El partido lindaba con lo espantoso. Los equipos se prestaban la pelota, , no podían dar tres pases seguidos a jugadores con el mismo color de camiseta y cuando
se veían atorados, tiraban el "bochazo" a donde saliera.
En los primeros minutos arrancó un poco mejor Temperley, con los
volantes mas metidos dentro de campo rival pero sin profundidad, ya promediando la etapa inicial, el visitante emparejó (para abajo, obviamente) el nivel y no lograban sacarse ventaja, del mismo modo que Astrada y Rivera no lograban sacarse el frío pues ninguno de los dos tocaba la pelota mas que para descolgar un centro llovido, o hacer un saque de arco.
A los 48 minutos del primer tiempo, Mantilla lo tomó a Ratto quien estaba en función ofensiva en la medialuna del área grande, con una barrera integrada por trece o catorce jugadores de ambos equipos, e
jecutó Figueroa y la pelota salió a cuatro metros del palo derecho de Rivera. Esto fue lo mas parecido a una situación de gol que hubo en todo el primer tiempo.
No arrancó mucho mejor el complemento, por el contrario el bajo nivel de juego fue agravado por la gran cantidad de detenciones que h

ubo en el juego por distintas circunstancias. Si en la etapa inicial había sido el Celeste el que había arrancado un poco mejor pisado que su rival, en el segundo tiempo era el visitante el que parecía mostrar, al menos, un poco mas de ambición, un par de centros y pelotas que le bajaron al nueve Concistre que no llegó a conectar inquietaron un poco, pero no demasiado.
Algunos corners ejecutados por ambos equipos en los cuales ganaban siempre las defensas y poco mas.
Céspedes hace entrar a Soler en lugar de Figueroa. El ex Arsenal y San Martín de San Juán se paró de punta y el Celeste perdió el nexo entre mediocampo y delantero. Bajó su nivel Luis Rodríguez, quien al menos en la primera etapa había intentado un par de cambios de ritmo) y el equipo no lograba hilvanar nada parecido a una jugada.
El tremendo choque de cabezas entre Mendoza y Gutiérrez detuvo el partido durante cinco minutos y entre la preocupación y la falta de respuestas futbolísticas, terminó de los ánimos de todos. No había modo a la vista de romper el Cero.
La entrada de Rodas, le dio a Temperley un trato de balón un poco mas asegurado y por ello, el Celeste logró en esos minutos, prevalecer en el juego, siempre sin la mas mínima profundidad ni generación de situaciones de peligro. El rival, parecía también que había decidido bajar la cortina y, por lo menos, sacar el bendito punto de visitante, sin embargo pagó demasiado cara su mezquindad.

44' del Segundo Tiempo, corner desde la derecha para el Celeste en el arco de las vías, lo ejecuta Manuel Rodas, Rodrigo Salomón anticipa a su marcador y saca un cabezazo al segundo palo, la pelota da en el poste, un defensor visitante trata infructuosamente de despejar logrando apenas alejar la pelota un par de metros del arco y el debutante Fernando Soler, con todo el arco a su disposición, convirtió el gol. Pese a los seis minutos de descuento, no había tiempo para mas. Pensamos que así hubieran jugado otros 90 o 120 minutos, muy difícilmente alguno de los dos equipos hubiera podido convertir en este partido otro gol.
Es el típico partido en el cual cuesta rescatar algo fuera del resultado. Temperley mejoró en defensa, pero enfrentó a un equipo sin ideas para complicar a nadie, al menos en el partido de hoy. Giannunzio volvió a mostrar un nivel con mas carencias que virtudes, los carrileros estuvieron aplicados en la marca pero sin peso ofensivo y adelante, todo fue voluntad, sacrificio y falta de ideas.
De todos modos el resultado, descomprime un poco la situación. Siempre es preferible trabajar para corregir errores y superar circunstancias donde no se encuentran las respuestas, tras resultados positivos que con la presión adicional de no lograrlos. Debemos ser honestos y admitir que, pese al resultado, todavía no vemos la luz en el fondo del túnel, pero, Temperley ganó, sumó de a tres y en los tiempos que corren esto, de ningún modo es poca cosa. A festejar, a templar los ánimos y a trabajar para tratar de repetir el resultado y superar el nivel mostrado en la próxima fecha.

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